¿Sabes el tiempo que tardas en hacer las tareas?
¿Te cuentas verdad acerca de la duración de las tareas?
O mientes descaradamente cuando le dices a tu pareja: «estaré list@ en 5 minutos». Luego resultan ser 15 o 20 minutos.
Este es un pequeño ejemplo de lo mal que calculamos el tiempo. A la baja o al alza, debido a nuestros cálculos vagos sobre la duración de las tareas.
Hay muchísimos casos en que los números que damos no aciertan ni para ganar el reintegro:
«La cena estará lista en 10 minutos». La terminas en 20 minutos y dejas la cocina que parece que haya estallado la bomba atómica, necesitas otros 20 para devolverle la dignidad.
«Me ducho y me arreglo en un periquete». Si miras la hora canaria, has tardado poco…
Piensas: «En esta media hora libre pondre una lavadora, doblaré ropa, barreré y prepararé la merienda de los niños». Como no te da tiempo dejas la mitad de las cosas a medias, mal hechas y tus hijos se quedan con hambre…
De superwoman a terminator
Yo no me contaba verdad sobre la duración las tareas del día a día. Solía hacerlas todas corriendo y cuantas más a la vez mejor… Iba como un pollo sin cabeza, corriendo de un lado para otro pensando que eso era ser productiva. Iba con mi capa roja de Superwoman, aunque a veces más bien parecía que me faltara la camisa de fuerza.
Ahora en cambio tengo mi propia tabla de tiempos de las tareas, se lo que duran y me permite planificar mi día a día mucho mejor. Encadeno tareas y hago algunas a la vez (solo si son compatibles, lo que yo llamo: fusiones). Voy más calmada, las hago mejor y soy mucho más productiva. Por las mañanas nunca olvido colocarme mis gafas de Arnold Schwarzenegger en «Terminator I» y cuando miro a una tarea doméstica me sale el tiempo al lado:
Saber los tiempos me permite planificar las mañanas y los días mucho mejor. Cuando veo un montón de ropa por doblar, ya no me agobio, solo pienso: 25 minutos. La idea es mirar a las tareas sabiendo lo que dura cada una. Esto que parece muy obvio no lo es tanto. ¿Por qué? Porque es difícil asignar unos minutos a una tarea que a veces tardas más y a veces menos. Y por nuestra tendencia a hacer cálculos vagos de las cosas.
¿Porqué es tan importante saber el tiempo que tardas en cada tarea?
Porqué cuando mires al cubo de la ropa sucia, o al suelo por barrer, a las camas sin hacer… puede que te sientas menos agobiad@ porque lo puedes cuantificar, sabes lo que tardas en hacerlo y por ende puedes planificar cuando hacerlo: o bien en ese momento o más tarde u otro día. Y cuando tengas media hora «libre» antes de salir a algún sitio, podrás cálcular fácilmente que tareas puedes hacer y terminar. Podrás gestionar tu tiempo y planificarte de forma más eficaz. Darle un valor numérico en minutos a cada tarea las hace más manejables, controlables y por supuesto, planificables. Y eso quita mucho agobio.
«Si ya, pero seguiré teniendo el mismo trabajo por hacer, de que me sirve torturarme sabiendo los minutos…»
Porque al tener un valor numérico podrás planificarlos, y esto ahorra tiempo. Y como además tendrás la casa organizada y ordenada porque habrás VACIADO antes de ir al IKEA, harás las tareas de modo más eficaz, porque el orden te ahorra tiempo, ¡lo encuentras todo a la PRIMERA!.
¿Qué tareas se pueden contabilizar en minutos?
Yo diría que todas. Aun así, en este post me refiero a las tareas diarias del tipo: poner una lavadora, doblar la ropa, hacer las camas, barrer, fregar, preparar la comida, bañar a los niñ@s, vaciar el lavavajillas, ducharse, peinarse, maquillarse.. y un montón más que llenan nuestro día a día.
¿Cómo puedo calcular lo que dura cada tarea?
La duración de las tareas variará mucho en función de cada persona y las circunstancias familiares. Hay muchas variables: agilidad de la persona, conocimiento de trucos para hacerlas más rápido, tipo de aparatos domésticos, número de miembros de la familia, si hay bebés, etc…En mi caso los minutos que doy a cada tarea son una media aproximada, pero son realistas, es decir no doy tiempos muy ajustados para no hacerlo a 200 por hora. Y también tengo variables: No le doy los mismos minutos a doblar toallas que a doblar ropa interior. Aún así, a veces debido a contratiempos u otros motivos las tengo que hacer con la sexta marcha puesta y a todo gas. Son excepciones, casos puntuales. La idea es poder hacerlas sin tener la mandíbula a punto de romperse por la tensión ni acabar con la lengua fuera.
Es importante asignar números redondos, fáciles de recordar. No asignes 8 minutos a ducharte , asigna 10, lo recordarás mejor, los múltiplos de 5 son más manejables. Te los puedes ir anotando en un papel y colgarlo en la nevera o memorizarlos directamente y ponerte cuanto antes las gafas de Terminator.
La importancia de terminar las tareas que se inician
Si inicias más tareas de las que puedes terminar, las dejarás a medias y acabarás tardando más en hacerlas… esas lavadoras que se quedan toda la noche en el tambor y al día siguiente hay que volver a hacerlas , o esa pila de ropa que se mueve de la cama a la silla, de la silla a la cama, de la cama a la mesa, de la mesa al sofá… no solo pierdes tiempo en cada movimiento, además se arruga.
La multitarea es una mentira
Aún así, si que hago más de una cosa a la vez, lo que yo llamo fusiones, que muchísima gente hace. Fusiones no es más que hacer dos cosas a la vez que sean compatibles, y que además puedan ayudar a hacer menos pesada una de las tareas. Un ejemplo seria escuchar audios (podcast, audiolibros, monólogos) en el móvil mientras doblas la ropa o preparas la cena.
Todo es cuestión de conocer los tiempos, priorizar y planificar.
La idea que he querido introducir en este post es lo práctico que resulta conocer los tiempos de muchas de las cosas que hacemos, la importancia de contarse verdad sobre la duración de la tareas. Este conocimiento se puede convertir en una herramienta, que usada como si fuera una calculadora te devuelve el control de tu día a día, te permite aprovechar el tiempo al máximo convirtiendo las tareas en «paquetes» más manejables y te ajuda a planificarlos y darles una prioridad frente a otra. La cálculadora del tiempo me quita agobio y la sensación de control me da cierta paz. Espero que os pueda servir de inspiración o ayuda, en todo caso me encantaría recibir vuestros comentarios para saber más de vosotr@s.
¿Y vosotr@s que calculadora del tiempo usáis? ¿Os contáis verdad sobre la duración de las tareas?
Una fuerte abrazo!
Susana
Las gafas de Terminator jeje muy buen símil👌🏻😉para detectar entre todo las prioridades👍🏻Me encanta el concepto de cuantificar en minutos nuestras tareas por muy engorrosas que sean ya que luego ves que pueden ocuparte menos tiempo del que imaginabas!
Gracias por tus ideas de nuevo Susana!a ponerlas en práctica…👌🏻👍🏻
Muchas gracias! Deseo que te sea de utilidad
puede resultar muy práctico
Un abrazo,
Susana